2020. De esta salimos mejores

Resumen

El 3 de marzo de 2020 se confirmó el primer caso de covid-19 en la Argentina. La enfermedad había sido considerada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una emergencia en salud pública de “preocupación internacional” el 30 de enero de ese mismo año. Ya desde finales de diciembre de 2019, sin demasiada información, pero en vista de lo que ocurría en China y Europa, quienes nos desempeñábamos en los departamentos de emergencia habíamos primero ensayado protocolos
para el uso de elementos de protección personal (EPP), aislamiento, atención de pacientes críticos, y paulatinamente comenzábamos a aplicarlos. Los centros de salud de CABA y el conurbano, el AMBA en su conjunto, recibían los primeros viajeros que regresaban de zonas de riesgo. Algunos con síntomas más o menos relacionados con la enfermedad. A la distancia parece muy lejano, pero en esos primeros meses hasta el primer caso, teníamos protocolos que iban evolucionando, modificación de zonas de riesgo, indicaciones de aislamiento, pruebas que demoraban semanas, actualizaciones cuasi
diarias en la definición de caso sospechoso –lo que casi siempre ocurría en horarios nocturnos–, etcétera. Y la historia continuó...