HEPATITIS AUTOINMUNE SERONEGATIVA. A PROPÓSITO DE UN CASO

SERONEGATIVE AUTOIMMUNE HEPATITIS. CASE REPORT

Juan Carlos Gómez Pastrana  0000-0003-2594-9768,1 Álvaro Beleño  0009-0006-2910-7495,1 Mauricio Martínez  0009-0005-0819-52491

1 Departamento de Medicina Interna. Hospital Universitario Fundación Sanatorio Güemes, Buenos Aires, Argentina.

AUTOR  PARA CORRESPONDENCIA

Juan Carlos Gómez Pastrana. Correo electrónico: juanca9216@hotmail.com

Los autores manifiestan no poseer conflictos de intereses.

 

 

Resumen

La hepatitis autoinmune (HAI) es una enfermedad inflamatoria y necrótica del hígado, crónica e infrecuente, caracterizada por la presencia de autoanticuerpos. Su etiología es desconocida. Afecta a 1 de cada 200.000 personas anualmente en los Estados Unidos y predomina en mujeres. Su presentación varía desde formas asintomáticas hasta la cirrosis y la falla hepática aguda. El diagnóstico se basa en la medición de autoanticuerpos, como los autoanticuerpos antinucleares (ANA), anticuerpos antimúsculo liso (ASMA, su sigla en inglés) y anticuerpos antimicrosomales de hígado y riñón (anti-LKM-1). El 10% de las HAI no presentan anticuerpos; se denominan HAI seronegativa y se necesita biopsia hepática para el diagnóstico. Hoy no existe un algoritmo establecido para el diagnóstico de esta variante. A continuación, se realizará una revisión bibliográfica sobre el tema y la presentación del caso de una mujer de 63 años de edad con antecedentes de hipertensión arterial, quien presentó astenia, adinamia, acolia e ictericia mucocutánea generalizada. Se realizaron análisis de laboratorio, con evidencia de hipertransaminemia y se arribó al diagnóstico de enfermedad hepática crónica avanzada mediante biopsia. Posteriormente se diagnosticó hepatitis autoinmune ante la negatividad de anticuerpos, para finalmente realizar tratamiento con corticoides y azatioprina, con lo que hubo resolución del cuadro.  

Palabras clave. Hepatitis autoinmune, autoanticuerpos antinucleares (ANA), azatioprina. DeCS.

 

Abstract

Autoimmune hepatitis (AIH) is a rare, chronic, inflammatory, and necrotic liver disease characterized by the presence of autoantibodies. Its etiology is unknown. It affects 1 in 200,000 people annually in the United States, predominantly women. Its presentation varies from asymptomatic forms to cirrhosis to acute liver failure. Diagnosis is based on the measurement of autoantibodies, such as autoantinuclear antibodies (ANA), anti-smooth muscle antibodies (ASMA), and anti-liver and kidney microsomal antibodies (anti-LKM-1). 10% of AIHs do not present antibodies; these are called seronegative AIHs, and require liver biopsy for diagnosis. Today there is no established algorithm for the diagnosis of this variant. A bibliographic review will be carried out on the topic followed by the presentation of the case of a 63-year-old woman with a history of arterial hypertension, who presented asthenia, adynamia, acholia, and generalized mucocutaneous jaundice. Laboratory testing was performed, with evidence of hypertransaminemia. A diagnosis of advanced chronic liver disease was made through biopsy and, subsequently, a diagnosis of AIH was reached due to negativity of antibodies. She was finally treated with corticosteroids and azathioprine, which led to the resolution of the condition.

Key words. Autoimmune hepatitis, autoantinuclear antibodies (ANA), azathioprine. MeSH.

 

DOI: https://doi.org/10.61222/9edjpa06

 

 

 

La hepatitis autoinmune se define como una enfermedad inflamatoria y necrótica del hígado; es crónica, progresiva, infrecuente y de etiología desconocida. Se caracteriza por la presencia de autoanticuerpos como los autoanticuerpos antinucleares (ANA), los anticuerpos antimúsculo liso (ASMA, su sigla en inglés) y anti-LKM-1 e hipergammaglobulinemia, especialmente la inmunoglobulina G, y la buena respuesta al tratamiento inmunosupresor. La hepatitis autoinmune seronegativa es aquella que comparte las mismas características que la HAI, pero sin presencia de autoanticuerpos, y el diagnóstico se efectúa mediante biopsia hepática.

La incidencia y la prevalencia de la HAI varía entre continentes, incluso entre países (1). En Suecia, el 76% de los casos ocurre en mujeres y en Estados Unidos la proporción de presentación de mujeres:hombres es de 3,5:1. En 2021, Nueva Zelanda informó una incidencia de 1,93 por cada 100.000 personas, con una prevalencia mundial de 3 por cada 100.000 en la población adulta (2). HAI seronegativa representa entre un 7% y un 34%, con un promedio del 10% de las HAI. En presentaciones agudas y graves de la HAI seronegativa, su frecuencia no supera el 7% de los casos, mientras que en presentaciones crónicas oscila entre el 1% y el 34% de los eventos publicados (3). El tratamiento en estos casos se basa en corticoterapia e inmunomoduladores como la azatioprina (AZT). El objetivo de este manuscrito es analizar la evolución de un caso de hepatitis autoinmune seronegativa, brindando un enfoque clínico para establecer un diagnóstico y tratamiento temprano bajo la mejor evidencia documentada, así como proponer un algoritmo diagnóstico que nos ayude al abordaje de estas patologías.

 

 

Presentación del caso clínico

 

Una mujer de 63 años de edad, cesante, residente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), con antecedentes de hipertensión arterial no tratada y una hermana con artritis reumatoide, buscó atención por un cuadro de un año de evolución de astenia, adinamia, pérdida no ponderada de peso, coluria, edema de miembros inferiores y posteriormente acolia e ictericia mucocutánea. Dentro de su examen físico, se destacaba un tinte ictérico generalizado, hepatomegalia y matidez sobre ambos flancos, sin onda ascítica positiva ni signos de encefalopatía hepática.

Al momento de su admisión se realizó un examen de laboratorio, en el que se evidenció hiperbilirrubinemia a expensas de la bilirrubina directa e hipertransaminemia, lo cual indicó un patrón de daño hepatocelular. Asimismo, se informó hiperferretinemia y saturación de transferrina de 100% (tabla 1).

 

TABLA 1. RESULTADOS DE LABORATORIO DE ADMISIÓN A LA SALA GENERAL

Valor de laboratorio

Resultado

Rango de referencia

Hcto

35%

35-45%

Hb

12 g/dl

13-15 g/dl

Leucocitos

9,1

x1000 m3

Neutrófilos

43%

55-65%

Linfocitos

41%

25-45%

Eosinófilos

5%

0-4%

Monocitos

11%

2-11%

VCM

89 Fl

85-95 Fl

MCH

30 Fl

27-33 Fl

Bilirrubina total

14 mg/dl

0-1,4 mg/dl

Bilirrubina directa

12 mg/dl

0-0,08 mg/dl

Fosfatasa alcalina

314 U/l

35-128 U/l

AST

1554 U/l

1-31 U/l

ALT

995 U/l

1-43 U/l

K

3,7 mg/dl

3,5-4,5 mg/dl

Na

133 mg/dl

135-145 mg/dl

Cl

99 mg/dl

95-105 mg/dl

TP

17 segundos

 

KPTT

47 segundos

 

Ferritina

3227 Ng/ml

15-150 Ng/ml

Saturación de transferrina

100%

20-50%

Fibrinógeno

115 mg/dl

150-450 mg/dl

 

Dentro sus estudios radiológicos se realizó inicialmente una ecografía de abdomen total, en la que se informó: hígado con forma respetada, algo disminuido de tamaño, parénquima heterogéneo de aspecto micronodulillar, vía biliar no dilatada, vesícula no distendida, paredes finas, alitiásica, bazo conservado, escaso líquido libre en cuatro cuadrantes, con lo cual se planteó que se trataba de una enfermedad hepática crónica avanzada. Posteriormente, se complementó el estudio con la realización de colangiorresonancia, en la que no se observó dilatación de las vías biliares intra y extrahepáticas ni imágenes con falta de relleno endoluminal, con lo que se descartó patología tumoral de la vía biliar.

Dados los hallazgos ecográficos, se realizó paracentesis diagnóstica, con resultado de líquido ascítico: aspecto turbio posterior a centrífugo ligeramente turbio, leucocitos, 4900, PMN 80% (3920 absolutos) / GR 4000 (conservados 60%) / Alb <0,2 / glucosa 27 / proteínas 0,74, GASA 1,4 compatible con peritonitis bacteriana espontánea, con rescate en bacteriológico de E. coli y betalactamasa de espectro extendido (BLEE), por lo que instituyó un tratamiento con meropenem por siete días.

Continuando con los estudios radiológicos, se complementó con la realización de Doppler esplenoportal, que informó: arteria hepática de calibre y flujo conservados; la vena porta mide 15 mm, está aumentada, permeable con flujo hepatopetal y velocidades disminuidas de 16/13 cm/s. La vena esplénica tiene 7,2 mm, está conservada, permeable con flujo hepatopetal. Las venas suprahepáticas permeables miden <8 mm, por lo que se descartó trombosis portal como etiología sobreagregada. En base a los hallazgos de hiperferretinemia y saturación de transferrina de 100%, se solicitó resonancia magnética nuclear (RMN) con protocolo para hemocromatosis, en la que no se observó cambios de señal en secuencias in-fase y out-fase, y finalmente gen de la hemocromatosis con resultado negativo, desestimando hemocromatosis como diagnóstico diferencial.

Ante sospecha de etiología autoinmune se solicitaron anticuerpos con ANA, LKM-1, ASMA, AMA, con resultado negativo, AntiSm, AntiRo, AntiLa, AntiRNP, con resultados negativos; el análisis para C-Anca fue positivo; la inmunoglobulina G fue de 1160 mg/dl (VN, 700 mg/dl-1520 mg/dl); la inmunoglobulina A, de 236 mg/dl (VN 90 mg/dl-300 mg/dl) y, por último, se descartaron las etiologías virales. Por otro lado, ante la etiología no concluyente, se realizó una biopsia hepática, con reporte de parénquima hepático: espacios porta con presencia de inflamación portal intensa de grado 4, actividad lobulillar de grado 3 y fibrosis a nivel del espacio portal marcado en estadio 4 (cirrosis), escasos plasmocitos, hierro escaso de grado I.

Finalmente, se realizó un diagnóstico de hepatopatía crónica avanzada secundaria a hepatitis autoinmune seronegativa (escala GIHA: 13 puntos), y se inició un tratamiento con metilprednisona 20 mg/día y azatioprina 100 mg/día. En los controles posteriores se evidenció una mejoría del patrón hepatocelular y persistencia de negatividad de anticuerpos (tabla 4). Por ello, se disminuyó la dosis de prednisona a 5 mg/día y la de azatioprina a 50 mg/día. Actualmente se encuentra en plan de trasplante hepático.

La paciente firmó el debido consentimiento informado.

 

 

Discusión

 

Dentro de las enfermedades hepáticas de presentación crónica, la hepatitis autoinmune sigue siendo una enfermedad compleja de etiología desconocida en la que se presenta una lesión hepática inmunomediada con una diversidad de presentaciones clínicas. La HAI seronegativa suele presentarse de forma inespecífica, como ocurrió en nuestro caso, en donde predominaron inicialmente los síntomas constitucionales y posteriormente se asociaron a un síndrome ictérico característico en esta entidad. Las presentaciones graves o fatales se asociaron a síntomas como dolor abdominal, vómitos e ictericia. Aunque esta presentación representa menos del 7% de los casos.

Para el diagnóstico de esta entidad se han utilizado los anticuerpos atípicos, descritos previamente en este artículo, así como los niveles de inmunoglobulina G. Si bien se documentaron cortes de pacientes con autoinmunidad negativa e hipogammaglobulinemia (4), en el caso anteriormente descrito no se evidenció hipogammaglobulinemia, lo que lo relacionaba en principio con una histología no avanzada, como se ha observado en los casos de HAI clásica, por lo que la biopsia hepática es fundamental en estos casos. En la actualidad no existen características morfológicas que sean específicas de HAI seronegativa, pero se tienen en cuenta las características típicas encontradas en estos pacientes, como cirrosis (19% a 83%), hepatitis periportal o periseptal de interfaz (75% a 83%), infiltrado necroinflamatorio linfoplasmocítico e infiltración de células plasmáticas (17% a 50%) (5), la infiltración de células plasmáticas suele ser tan extensa como en los casos de HAI clásica. En los casos agudos, la mayoría de las biopsias hepáticas han informado que hasta en un 97% de los mismos se observó necrosis centrolobulillar e infiltración masiva de células plasmáticas. También en estos pacientes se evidenció menos fibrosis, en contraste con nuestro caso, donde la biopsia hepática informó espacios porta con presencia de inflamación portal intensa de grado 4, actividad lobulillar de grado 3 y fibrosis a nivel del espacio portal marcado en estadio 4 (cirrosis), escasos plasmocitos y hierro escaso de grado I. Este último hallazgo es característico en los casos de hepatopía crónica secundaria a HAI seronegativa.

En la mayoría de los estudios se utilizó el sistema de puntuación integral revisado, en lugar del simplificado, del Grupo Internacional de Hepatitis Autoinmune (HIGA), ya que no existe un sistema de puntuación diseñado únicamente para HAI seronegativa. La puntualidad del diagnóstico de HAI seronegativa es fundamental, dado que las puntuaciones bajas en los criterios simplificados se han asociado con un mayor riesgo de descompensación a hepatitis fulminante. El valor de HIGA para nuestro paciente fue de 13, lo que indicó el alto riesgo de falla hepática aguda de la paciente y establecer el inicio temprano del tratamiento inmunosupresor.

En cuanto al tratamiento con corticoides y azatioprina en pacientes con HAI seronegativa, existe la paradoja de positividad de anticuerpos atípicos durante el seguimiento, lo que sugiere la hipótesis de un proceso inhibidor de células B mediado por inmunidad que respondió a esteroides. En una cohorte de pacientes con HAI seronegativa a quienes se les realizó tratamiento con azatioprina 50 mg y prednisona 30 mg en comparación con prednisona 40 mg al día, no se logró encontrar una correlación entre la aparición tardía de ANA y el régimen de tratamiento (4). Otro estudio realizado en la Clínica Mayo examinó a 107 pacientes con HAI seronegativa (6). Se trató de correlacionar la aparición y desaparición de anticuerpos atípicos a lo largo del tiempo. El estudio evaluó los resultados de la expresión de autoanticuerpos con y sin regímenes convencionales de corticosteroides. Se encontró que hasta el 76% de los pacientes con HAI seronegativa diagnosticados por patología hepática y presencia de anticuerpos perdieron autoanticuerpos de tipo ASMA y ANA durante 128 meses. En algunos casos, pero no en otros, la pérdida de anticuerpos se asoció con mejoras en las enzimas hepáticas, las pruebas de función hepática y los hallazgos histopatológicos. También se observó que la positividad fluctuó con el tiempo de tratamiento. Por lo tanto, también se debe tener precaución con las pruebas iniciales de anticuerpos negativas, ya que la aparición de anticuerpos puede retrasarse. Si se comparan estos datos, nuestra paciente recibió tratamiento con azatioprina en dosis de 100 mg y meprednisona de 10 mg en forma diaria, en un tiempo de seguimiento de seis meses y actualmente recibe 50 mg de azatioprina, sin presentar seroconversión e internaciones por complicaciones (falla hepática aguda, infecciones, ascitis), con lo que se podría concluir que a mayor dosis de inmunosupresión que la documentada, más profundo el proceso inhibidor de células B, lo cual aumenta su supervivencia (tabla 2). Las complicaciones o descompensaciones en esta fase de la enfermedad son iguales que en aquellos con hepatopatía crónica avanzada (peritonitis bacteriana espontánea, hipertensión portal y hemorragia variceal, encefalopatía, falla hepática aguda y síndrome hepatorrenal) por otro tipo de etiologías, y en este grupo de población la peritonitis bacteriana espontánea es una de las más frecuentes (7), como sucedió en el caso presentado.

 

TABLA 2. INICIO Y SEGUIMIENTO DE LA RESPUESTA ANTE MPD 20 MG/DÍA/AZT 100 MG/DÍA DURANTE EL PRIMER MES Y LUEGO 50 MG/DÍA, MEDIANTE HEPATOGRAMA Y ANTICUERPOS DURANTE EL PERÍODO DE SEIS MESES

 

MESES DE SEGUIMIENTO

 

Inicio

MPD/AZT

1.e mes

2° mes

3.er mes

4° mes

5° mes

6° mes

VN

PLAQUETAS X 1000 m3

110

68

100

86

102

99

119

150-450

BD (MG/DL)

14

10

5,87

3,4

0,65

0,5

0,3

0-0,08

FAL U/L

330

260

343

319

496

423

300

35-128

AST U/L

1502

116

178

129

83

69

45

1-31

ALT U/L

900

110

143

114

98

81

26

1-41

TP

54%

44%

47%

61%

70%

80%

80%

 

KPTT (SEGUNDOS)

48

54

58

42

40

40

39

 

LC1

Negativo

 

 

Negativo

 

 

Negativo

 

ANA

Negativo

 

 

Negativo

 

 

Negativo

 

ASMA

Negativo

 

 

Negativo

 

 

Negativo

 

LKM-1

Negativo

 

 

Negativo

 

 

Negativo

 

PANCA

Negativo

 

 

Negativo

 

 

Negativo

 

MPD: meprednisona; AZT: azatioprina; FAL: fosfatasa alcalina; BD: bilirrubina directa; AST: aspartato transaminasa; ALT: alanino aminotransferasa; Tp: tiempo de protrombina; KPTT: tiempo de protoplásmica; ANA: anticuerpos antinucleares; ASMA: anticuerpos antimúsculo liso; LKM-1: anticuerpos antimicrosomales de hígado y riñón; pANCA: anticuerpos anticitoplasma de neutrófilos; LC1: anticuerpo anticitosólico hepático 1.

 

La HAI seronegativa representa entre el 2% y el 3% de las etiologías de trasplante hepático. La supervivencia a cinco años de los pacientes y sus injertos en HAI oscila entre el 73% y el 92%, y la supervivencia actual a 10 años después del trasplante fue >70%. Además, se ha demostrado que estos pacientes tienen un mayor riesgo de hepatitis del injerto después del trasplante (8). Wigg y colaboradores, en su experiencia de 12 años de valoración de los pacientes con trasplante hepático secundario a HAI seronegativa, evaluaron a 110 pacientes en dicho lapso. Se produjeron 31 muertes, de las cuales el 67% ocurrió en menos de dos meses, y la causa fue isquemia del injerto y disfunción primaria del injerto. Ajustando los factores de riesgo de mortalidad temprana previos al trasplante, se encontró que la supervivencia después del trasplante por HAI seronegativa fue del 83%, 81%, 73% a los 2, 12 y 60 meses, respectivamente. La causa más común de muerte prematura fue la sepsis o disfunción multiorgánica. Los factores que contribuyeron al riesgo de muerte prematura incluyeron un alto índice de masa corporal del donante, la edad del receptor de más de 50 años y el origen étnico del receptor no caucásico (9). En nuestro caso, nuestra paciente aún espera que la reciba algún centro de trasplante; sin embargo, no presenta los factores de riesgo habituales del receptor. En base a esta revisión y el caso clínico documentado, se propone un algoritmo de diagnóstico, manejo y seguimiento en los pacientes con diagnóstico de HAI seronegativa (Fig. 1).

 

Figura 1. Algoritmo de diagnóstico y terapéutica de la hepatitis autoinmune seronegativa. Las hepatitis seronegativas son casos similares a la HAI, pero carecen de autoinmunidad típica y ausencia de otras etiologías de hepatitis (viral, DILI, alcohólica, metabólica, tumoral). Inicialmente se excluyen estas etiologías y la positividad de anticuerpos típicos; luego se implementa la escala de HIGA (puntaje HIGA >9), que indica el diagnóstico definitivo o probable de HAI. Si falta un diagnóstico clínico por excluir o la puntación HIGA <9 se deberán solicitar anticuerpos atípicos y ante ausencia de estos probablemente se realice el diagnóstico de hepatitis autoinmune seronegativa. Finalmente, el diagnóstico debe confirmarse luego de tres meses de tratamiento de prueba con corticoides y azatioprina. * Hemocromatosis, enfermedad de Wilson, tumores de la vía biliar. ANA, anticuerpos antinucleares; ASMA, anticuerpos antimúsculo liso; anti-LKM-1, anticuerpos antimicrosomales de hígado y riñón; anti-ASGPR, anticuerpo antirreceptor de asialoglicoproteína; anti-LC1, anticuerpo anticitosol hepático; anti-LKM-3, antihígado, riñón microsomal 3; anti-SLA-LP, antiantígeno hepático soluble/anticuerpo hígado-páncreas; anticuerpos anti-SMA, antimúsculo liso; anti-UGT, anti-UDP-glucuronosiltransferasa; pANCA, anticuerpo perinuclear anticitoplasma de neutrófilos.

 

 

Conclusión

 

La hepatitis autoinmune seronegativa continúa siendo una enfermedad de poca prevalencia y de difícil diagnóstico. Se debe considerar esta entidad en pacientes con hepatopatía crónica avanzada que presenten falla hepática aguda y en quienes no se reconoce una causa de base. El tratamiento inmunopresor oportuno en este tipo de pacientes es el pilar del tratamiento, aunque se obtiene la remisión sólo en algunos pocos casos.

 

 

Referencias bibliográficas

 

1.   Czaja AJ. Diagnosis and management of autoimmune hepatitis: Current status and future directions. Gut Liver 2016;10:177-203

2.   Mack CL, Adams D, Assis DN, et al. Diagnosis and management of autoimmune hepatitis in adults and children: 2019 practice guidance and guidelines from the American association for the study of liver diseases. Hepatology 2020;72:671-722

3.   Czaja AJ. Autoantibody-negative autoimmune hepatitis. Dig Dis Sci 2012;57:610-24

4.   Wang QX, Jiang WJ, Miao Q, et al. Clinical and histological features of autoantibodynegative autoimmune hepatitis in Chinese patients: A single center experience. J Dig Dis 2013;14:175-80

5.   Krawitt EL. Autoimmune hepatitis. N Engl J Med [Internet] 2006;354:54-66

6.   Czaja AJ. Behavior and significance of autoantibodies in type 1 autoimmune hepatitis. J Hepatol 1999;30:394-401

7.   Biggins SW, Angeli P, García-Tsao G, et al. Diagnosis, evaluation, and management of ascites, spontaneous bacterial peritonitis and hepatorenal syndrome: 2021 practice guidance by the American association for the study of liver diseases. Hepatology 2021;74:1014-48

8.   Sherigar JM, Yavgeniy A, Guss D, et al. Seronegative autoimmune hepatitis A clinically challenging difficult diagnosis. Case Rep Med 2017:1-3

9.   Wigg AJ, Gunson BK, Mutimer DJ. Outcomes following liver transplantation for seronegative acute liver failure: Experience during a 12-year period with more than 100 patients. Liver Transpl 2005;11:27-34